¿A qué padre no le ha pasado alguna vez, escuchar estas frases de sus hijos a la hora de comer?
“No me gusta” (sin haberlo probado)
“Uy verde, no quiero”
“Yo esto no me lo como”
“Que asco”
Y es que existe una realidad y son los niños que no comen alimentos nuevos o» picky eaters», que son aquellos niños que les cuesta probar nuevas comidas, normalmente tienen un patrón de alimentación muy cerrado y rechazan nuevos alimentos, texturas o tipos de cocinados.
Lidiar a diario con niños que no comen alimentos nuevos puede ser muy duro y agotador. Y lo más importante que tenemos que saber para solucionar esta faceta en nuestros peques es que vamos a requerir de mucha paciencia y de mucho tiempo, porque cualquier cambio de hábito implica antes un cambio psicológico.
Consejos para lidiar con niños que no comen alimentos nuevos
– Platos variados con diferentes alimentos y raciones pequeñas de cada. Intentaremos ofrecer platos que tengan separaciones, y en cada separación pondremos una cantidad pequeña de distintos alimentos. De esta forma evitamos que nuestro niño se agobie al ver una gran cantidad de un solo alimento. Y además, de forma indirecta le estamos dando libertad para que elija sin coaccionarlo (fundamental si queremos que coma de forma sana).
– Combinación de alimentos. Una de las técnicas que se esta viendo que es efectiva para los niños que no comen alimentos nuevos, es combinar alimentos que sean bien aceptados por los niños con otros que sean más rechazados.
– Variar en la forma de cocinado: Hay más vida del brócoli cocido. Con la ayuda de Google seguro que encuentras una receta que sea llamativa.
– Repetición de alimentos. Un niño que no come alimentos nuevos necesita hasta 35 exposiciones a un mismo alimento para que lo acepte, es decir, lo más normal es que el niño rechace el alimento muchas veces antes de que se lance a probarlo.
– Evitar discusiones sobre la comida. De las cosas que tenemos que evitar, si el niño no quiere comer no debemos de obligarle a ello, ya que sólo estaremos ayudando a crear una relación tormentosa con la comida.
– Comer en familia: nada mejor que disfrutar de una buena comida en un buen ambiente, que sea adecuado para animarse a probar nuevos alimentos o comidas.
– Involucrar a los niños en la preparación de las comidas: desde la elección del menú, pasando por la compra, el cocinado y preparando la mesa. Puede que nuestro niño no sea un gran comedor, pero así ayudamos a que cree una relación con los alimentos.
Recuerda: si necesitas ayuda con la alimentación de tu hijo/a, acude a un profesional cualificado, en este caso un nutricionista infantil.
Nuestros talleres para padres
Con estos talleres pretendemos dar ideas nuevas para facilitar la alimentación de los más pequeños. Somos conscientes de que con el ajetreo del día a día muchas veces no se nos ocurren platos divertidos o variados que ayuden a nuestros hijos a comer de una manera equilibrada y sana, por eso queremos aportar ideas a los padres para facilitarles esta tarea con nuestros talleres de cocina para padres !No dudes en inscribirte!